En los siglos XVII y XVIII fue muy corriente hablar de una supuesta
religión natural o religión racional: un conjunto de verdades a las que
podíamos llegar mediante el empleo de la razón. Tenía 2 creencias básicas:
1- hay un ser supremo que ha creado o diseñado el mundo
2- el alma es inmortal
1. crítica al
argumento del designio
Este argumento parte de la constatación de que el universo en su
conjunto es extraordinariamente parecido a una máquina bien ordenada. Como las
máquinas son resultado del diseño, elaboración de seres inteligentes (hombres),
debemos concluir que el universo ha tenido que ser diseñado por una
inteligencia con facultades mucho más
amplias.
HUME:
1- lo anterior es posible, pero también lo es la “vieja hipótesis
epicúrea”: una materia a la es inherente el movimiento tiene que acabar
produciendo un orden como el que presenta el universo
2- el universo se parece más a un animal o vegetal que a una máquina.
Por tanto es posible que su causa se parezca a la de aquellos (el principio de
generación y el principio de vegetación). Al igual que un árbol deja caer
semillas en campos cercanos y da origen a otros árboles, nuestro sistema
planetario podría ser un gran vegetal que produce ciertas semillas (cometas) y
se esparcen y dan lugar a nuevos mundos.
Puede parecer fantasía, pero ¿es más razonable creer en un diseñador
inteligente?
Críticas al argumento del designio:
1- el argumento no permite decidirnos entre politeísmo y monoteísmo.
El universo puede ser resultado de la cooperación de varias divinidades
cooperadoras. El argumento no es fruto de investigadores imparciales sino de
personas convencidas previamente del contenido de la “religión verdadera” y que
buscan confirmarla a toda costa
2- existe el mal en el mundo. La divinidad no ha sido capaz de crear
seres desprovistos de dolor. Podemos inferir su absoluta indiferencia hacia la
felicidad humana. Sería un ser que no tendría mas preferencias por el bien
frente al mal que las que muestra por el calor frente al frío.
2. crítica al
argumento a priori (o cosmológico)
Este argumento dice: todo lo que existe debe tener una causa o razón
de su existencia. Al ascender de los efectos a las causas tenemos que recurrir
finalmente a una causa última que sea necesariamente existente.
Ahora bien ¿es verdad que todo lo que existe debe tener una causa o
razón de su existencia? Todas las cosas que vemos tienen una causa, pero eso no
implica que deban tenerla.
Todo lo que podemos concebir, es posible. No podemos excluir la
posibilidad de que el universo no tenga causa. O incluso que sea eterno.
El argumento a priori es inválido. Tan posible es que el mundo haya
sido creado por Dios como que haya surgido de la nada o que sea eterno.
3. el
problema del alma
Tener en cuenta los argumentos obtenidos a partir de la analogía de la
naturaleza, los “argumentos físicos”
1- Cuando 2 objetos están tan estrechamente conectados que todas las
alteraciones en uno van acompañadas de alteraciones en el otro, podemos
concluir que cuando se producen alteraciones mayores en el primero y se
disuelve totalmente, se seguirá una total disolución del segundo
2- nada es eterno en este mundo, todo está sometido a un flujo y
cambio continuos. El pensar que el alma es inmortal es contrario a los
principios de la analogía. Nuestra situación de inconsciencia antes de la
formación del cuerpo es prueba
convincente de que tras su disolución caeremos en estado similar.